Son temidas por absolutamente todos los conductores. Ninguno estamos a salvo de sufrir una en el peor momento posible. Pero, ¿cuáles son las principales averías en automóviles? ¿A qué fallos nos tendremos que enfrentar con una mayor regularidad? vamos a tratar de analizarlo un poco al detalle a lo largo de estas nuevas líneas de nuestro blog.
Nos encantan los coches y nos encanta conducir. Por eso, siempre tratamos de ofrecer algo de asesoramiento sobre ellos, como cuando os explicamos cómo preparar tu coche para el invierno y tratar de evitar los principales obstáculos que nos solemos encontrar durante los meses fríos del año.
Ni te imaginas la de conductores que no «miran» para su coche hasta que tienen que llevarlo a revisión, a la ITV o a cambiar las ruedas. Son la inmensa mayoría. Por desgracia, el mantenimiento de un vehículo es algo casi constante. No solo lavarlo o tenerlo preparado, sino vigilar los niveles de líquidos y aceite, la presión y el dibujo de los neumáticos, los filtros…
Entonces, ¿cuáles son las principales averías en automóviles?
A continuación, te dejamos un pequeño ranking sobre las principales averías en automóviles que nos encontrar en la actualidad:
- Problemas con la batería.
La batería es una de las principales fuentes de problemas en los coches. Las baterías pueden descargarse con el tiempo, especialmente en climas fríos, y eventualmente necesitarán ser reemplazadas. Los cables de la batería también pueden corroerse o aflojarse, lo que puede provocar problemas de arranque. ¿Lo peor? Que no avisa. Nos encontramos con este inconveniente de la nada. - Problemas con el sistema de frenos.
Los problemas con el sistema de frenos son extremadamente peligrosos y deben abordarse de inmediato. Esto puede incluir frenos desgastados, líquido de frenos bajo o contaminado, discos de freno deformados o problemas con el sistema ABS. - Fugas de líquidos.
El tercero de los principales averías en automóviles tiene que ver con las fugas de líquidos, como aceite, refrigerante o líquido de transmisión. Esto es una señal de problemas graves en el coche. Las fugas pueden deberse a juntas defectuosas, mangueras desgastadas o dañadas, o problemas más graves en el motor o el sistema de refrigeración. - Problemas con el sistema de transmisión.
Estos inconvenientes son muy temidos porque también son muy costosos de reparar. En este grupo, podemos incluir problemas con la transmisión automática, como problemas de cambio de marchas o fugas de líquido de transmisión, o problemas con la transmisión manual, como problemas de embrague o engranajes. - Problemas con el sistema de refrigeración.
La principal razón tiene que ver con fugas en el radiador, problemas con el termostato, la bomba de agua o falta de líquido de refrigeración. El sobrecalentamiento del motor puede causar daños graves y costosos si no se aborda de inmediato.
¿Has padecido en algún momento alguna de estas principales averías en automóviles?